La necesidad inminente de la UE de contrarrestar la influencia de China en América Latina (factor español)

Con dos de las regiones más importantes del mundo y una cincuentena de países, España se ha ofrecido a aprovechar la presidencia rotatoria de la Unión Europea que asumirá a partir de mediados de 2023 para fortalecer los lazos del bloque con América Latina.

España tiene seis meses para que la UE vuelva a girar hacia Sudamérica, pero el verdadero reto será que este compromiso se extienda más allá de los seis meses de su presidencia. Si esto sucede, si tLa Unión Europea y América Latina no tienen una alianza fuerte y más consolidada más allá del 31 de diciembre de 2023, será un rotundo fracaso. No siempre se puede contar con los esfuerzos de España en este sentido, hay que convencer al resto de miembros.

¿Tiene España suficiente influencia en Bruselas para convencer a la Unión Europea de la necesidad de firmar una gran alianza con América Latina? ¿Tendrá LA al otro lado del Atlántico para seducir a la región apostando por un acuerdo en el que la UE podría perder interés como ha ocurrido en el pasado?

Es un camino de dos vías. Europa puede estar muy interesada en fortalecer sus alianzas con América Latina, pero si la contraparte no piensa lo mismo. La UE quiere que esta relación nueva o reformulada entre ambos sea simétrica, horizontal y no vertical. Lo que pasa es que la Unión Europea no sabe realmente qué quiere de América Latina y, al mismo tiempo, América Latina no tiene muy claro qué quiere de la Unión Europea”.

Descubrirlo en una época como la nuestra tampoco es fácil. La invasión de Rusia a Ucrania ha centrado la atención del bloque comunitario. Durante la última década, la inestabilidad en otras regiones más cercanas como Oriente Medio o el Norte de África ha hecho que, a pesar de Se ha subestimado el hecho de que América Latina siga siendo un importante punto de inversión para la UE y su importancia geoestratégica.

“El foco ha estado en otras áreas en los últimos años, pero no debemos olvidar que la Unión Europea invierte más en América Latina que en China, Rusia e India juntas” dice Malamud, quien también es profesor de historia americana en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Es un caso claro de negligencia, de olvido, pero parece que la irrupción de China en el territorio ha encendido una luz roja tanto en la Unión Europea como en España. Estamos perdiendo presencia en una región que debería ser fundamental para nosotros”

China no ha perdido el tiempo en este sentido durante la última década. Inmerso en una guerra comercial con Estados Unidos, ha encontrado en la región un lugar perfecto para expandir su influencia política a nivel global, obtener las materias primas que necesita para impulsar su modelo económico e influir en una región estratégica.

OBOR

En diez años, de 2008 a 2018, el volumen del comercio entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe apenas ha aumentado, pasando de 185.500 millones de euros a 225.400 millones de euros. Durante este periodo, han abogado ante el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), el volumen del comercio con China se ha multiplicado por diez, y actualmente son 21 los países de la región que forman parte de la nueva iniciativa de la ruta de la seda impulsada por el chino.

Sin embargo, últimamente, algunos países latinoamericanos pueden estar comenzando a cansarse del tipo de relación bilateral que se ha construido en torno a los intereses chinos.

“Crece la resistencia a la presencia china en América Latina. Lo que hace unos años se veía como una gran oportunidad empieza a generar contradicciones”, dice Malamud.

“Es un gran mercado para la exportación de materias primas latinoamericanas, pero el problema es que se traduce en un bajo valor agregado que pone a las economías latinoamericanas en una situación difícil. China no está interesada en desarrollar la industria sudamericana, sino en extraer sus recursos.

España, ya se han hecho oír las primeras voces vinculadas al Gobierno que reclaman la enorme oportunidad que supondrá para la Unión Europea y América Latina lograr esta alianza que puede consumarse en la cumbre Europa-América Latina que se celebrará en julio de 2023. En este sentido, España tiene un nombre especialmente bien situado dentro de la UE. El alto representante de la Unión Europea para la política exterior, Josep Borrell, que podría jugar un papel muy importante en la definición de las prioridades exteriores del bloque de la UE, llegó a decir que “Si Europa quiere tener influencia como actor geopolítico, debe prestar más atención a lo que sucede en América Latina y el Caribe”.

Josep Borrell, aleccionando la tensión entre Rusia y Ucrania: "Estamos en el momento mas peligroso desde la Guerra Fria"
jose borrell

El expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha señalado durante la presentación de la nueva agenda de cooperación Iberoamericana-Unión Europea que “La gran esperanza de crecimiento de América Latina es aliarse con Europa, un camino que pasa por la integración y la cooperación”.

En esta agenda se esperaba que el crecimiento promedio de los países latinoamericanos esperado en 2022 fuera “débil e insuficiente”con un crecimiento medio del 2,1% que se ve fuertemente afectado por los cinco millones de empleos que no han logrado recuperarse tras la pandemia, especialmente entre mujeres y jóvenes.

By Confidencial de México

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